Marea Stamper deja atrás a The Black Madonna

Foto cortesía del artista

La DJ y productora norteamericano de 43 años Marea Stamper, ha cambiado su nombre artístico dejando atrás a The Black Madonna e iniciando una nueva etapa bajo el alias de The Blessed Madonna.

En un abrupto comunicado a través de sus redes sociales, Stamper hizo pública la decisión de modificar su nombre artístico 24 horas después de que su colega Monty Luke lanzara una petición en charge.org solicitando el cambio al considerar el nombre como “inapropiado, problemático, ofensivo y de apropiación cultural”. En menos de 12 horas, la petición había sido firmada por más de 1,000 personas.

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Friends, I have changed my name to The Blessed Madonna. I have always been transparent about my faith because I felt a responsibility to be clear about who I was and who I was not. The name was a reflection of my family’s lifelong and profound Catholic devotion to a specific kind of European icon of the Virgin Mary which is dark in hue. People who shared that devotion loved the name, but in retrospect I should have listened harder to other perspectives. But now I hear loud and clear. My artist name has been a point of controversy, confusion, pain and frustration that distracts from things that are a thousand times more important than any single word in that name. We're living in extraordinary times and this is a very small part of a much bigger conversation, but we all have a responsibility to try and affect positive change in any way we can. I want you to be able to feel confident in the person I am and what I stand for. Thank you for listening. Stay blessed. -Love Marea PS: If you read this far, arrest the cops that murdered Breonna Taylor in my hometown of Louisville, Kentucky: Jonathan Mattingly, Brett Hankison, Myles Cosgrove.

A post shared by The Blessed Madonna (@blessed_madonna) on Jul 20, 2020 at 2:56am PDT

He cambiado mi nombre a The Blessed Madonna.

Siempre he sido transparente sobre mi fe porque sentí la responsabilidad de ser claro acerca de quién era y quién no. El nombre era un reflejo de la profunda y profunda devoción católica de mi familia a un tipo específico de ícono europeo de la Virgen María, que tiene un tono oscuro. A las personas que compartieron esa devoción les encantó el nombre, pero en retrospectiva, debería haber escuchado con más atención otras perspectivas.

Pero ahora escucho fuerte y claro. El nombre de mi artista ha sido un punto de controversia, confusión, dolor y frustración que distrae de las cosas que son mil veces más importantes que cualquier palabra en ese nombre. Vivimos en tiempos extraordinarios y esta es una parte muy pequeña de una conversación mucho más grande, pero todos tenemos la responsabilidad de tratar de afectar el cambio positivo de cualquier manera que podamos. Quiero que pueda sentirse seguro de la persona que soy y de lo que defiendo.

Gracias por escuchar. Mantente bendecido.

– Con amor, Marea