Foto vía Twitter
Anna Lunoe (host de su propio radio show, DJ, cantante y productora australiana) acaba de reafirmar el amor que siente por la música y por todo lo que hace en torno a ella. El pasado 15 de abril, un par de días antes de presentarse en Coachella y de compartir el escenario con Skrillex, Anna nos sorprendió con una fotografía en la que ya eran evidentes los primeros meses de su embarazo. Desde que reveló la noticia con dicha foto, muchos nos preguntamos qué haría con su carrera y, sin decir hablar al respecto, respondió con hechos.
Fue a finales del mismo mes cuando Lunoe lanzó “Godzilla”, su último “hijo musical” antes de entrar a la verdadera maternidad, regalándonos otra buena fusión de house y bass, acompañada de su característica y melódica voz que ha dado vida a la mayoría de las producciones en las que ha trabajado.
En ningún momento canceló las presentaciones que ya tenía pactadas e hizo todo lo contrario a lo que la mayoría podía esperar al seguir tocando en todo tipo de venues y grandes festivales. Claramente, en algún momento tenía que hacer una pausa para cuidar de ella y del segundo “Luney” (diminutivo de su apellido, con el que se ha referido al bebé) que viene en camino.
Anna eligió el mejor escenario para despedirse temporalmente: el décimo aniversario de HARD, festival del cual ha sido parte desde 2014, cuando el mismo Gary Richards (Destructo, fundador y CEO de HARD Events) la invitó a integrarse a la familia, lo que hizo que este set fuera doblemente especial.
Durante una hora, la australiana tocó “Stay Awake”, “Stomper”, “Bulls Eyes” y “Radioactive”, sólo por mencionar algunas de sus canciones. Además, pasó por los que ella considera los mejores tracks de los últimos 10 años.
Sin haber nacido aún, el hijo de Anna Lunoe ha tocado frente a miles de personas en diferentes escenarios. Sin duda, este set es una bomba verdaderamente enérgica que merece ser escuchada de principio a fin. Así es como Anna Lunoe decidió tomar una pausa para darle la bienvenida a la nueva etapa de su vida: